El Criticón

Opinión de cine y música

Archivos mensuales: junio 2008

John Williams – The Kingdom of the Skull Crystal

John Williams – Indiana Jones and the Kingdom of the Skull Crystal
Género: Banda sonora original
Año: 2008, Concord Records
Valoración:

No hay tantos fanáticos de la música de cine como cinéfilos o simplemente seguidores de la saga de Indiana Jones, pero aún así la expectación ante la vuelta de John Williams a una de sus sagas más conocidas y aclamadas también era altísima. En cierta manera ha ocurrido lo mismo que con la película: dicha expectación superó a la realidad, esperando gran parte del público la última obra maestra del género. No ha sido así y muchos se han echado injustamente las manos a la cabeza. La realidad sólo es agria si no se acepta como tal: El reino de la calavera de cristal es una banda sonora de alta calidad, algo a lo que nos tiene acostumbrados John Williams, pero está un escalón por debajo de la trilogía. Hay que decir que estuvo mucho más inspirado en las nuevas entregas de La guerra de las galaxias, pero no por ello esta obra deja de ser un plato de agradable degustación.

En busca del arca perdida giraba en torno a una leyenda de gran calado en el subconsciente con una música repleta de temas poderosos, sobrecogedores, El templo maldito se inclinaba más hacia la acción y el terror con motivos oscuros e imponentes, y La última cruzada ofrecía un sin fin de temas de aventuras. El reino de la calavera de cristal se mueve por lo general en un tono de misterio, de magia oculta. Los motivos principales son de rasgos místicos y etéreos donde se sugiere más que se expone. Es por ello menos espectacular que sus hermanas y puede dejar algo indiferente en una primera escucha, pero es indudable que la música sigue siendo de primerísimo nivel y se amolda a la perfección a las imágenes. Hay que indicar que en la edición en disco los cortes no mantienen el orden correcto, siguiendo la nefasta política que vimos en la antigua trilogía. Es imperdonable que a estas alturas se sigan cometiendo estos estropicios.

La composición se inicia cómo no con los acordes de la Raiders March, a los que siguen una versión del tema de Marion, también protagonista en esta entrega. A continuación hacen acto de presencia los temas centrales: Call of the Crystal e Irina’s Theme. El primero, obviamente centrado en las calaveras de cristal, ofrece melodías suaves, etéreas, de misterios latentes, y consigue atrapar e inquietar con gran eficacia. Irina’s Theme mantiene notables semejanzas con el anterior al estar el personaje muy relacionado con las calaveras, pero el registro es más oscuro y dramático. Se retrata muy bien la personalidad fría y con creencias esotéricas de la villana. En el tramo final el corte adquiere gran fuerza con unos espectaculares vientos, para luego volverse sutil de nuevo.

Para presentar al joven Mutt tenemos el característico corte de acción y humor en la línea de Basket Game o Escape from Venice. Es divertido, pegadizo y muy bonito. Se mantiene en una línea semejante The Snake Pit, otro instante de humor muy logrado. Con un homenaje al tema del Arca (en La última cruzada también hubo uno) volvemos al motivo de la calavera, encontrándose ahora mezclado con notas de misterio y tenues marchas marciales para remarcar la presencia de los soviéticos. Es una aproximación al tema central bastante variada e intensa, y cerca del final Williams ofrece unas melodías magistrales como sólo él sabe hacer: poderosas, sobrecogedoras y con espléndidas fanfarrias.

The Journey to Akator es un corte de transición, con versiones del tema de Indiana Jones y la música dedicada a presentar la aldea sudamericana, cómo no de rasgos mejicanos. A Whirl Through Academe es una pista de acción, completamente puesta a las órdenes de las imágenes y no especialmente destacable, mientras que “Return” es parecida pero inclinada hacia la línea de intriga. Mucho más interesante es lo que viene a continuación. El inmenso The Jungle Chase está a la altura de los grandes temas de acción del maestro: gran imaginería, con constantes y geniales variaciones que se amoldan a las imágenes sin perder los motivos que son representados y por supuesto un fantástico sentido del espectáculo. Las marchas militares rodeadas de vientos son fascinantes.

La búsqueda de las tumbas de los Conquistadores y por ende de las calaveras es representada por motivos de intriga (Orellana’s Cradle) y de acción (Grave Robbers). Este último se construye con una comedida amalgama de percusiones y orquesta que producen muy bien sensaciones de agobio y peligro, mientras que el que le precede muestra rasgos misteriosos muy sencillos. Hidden Treasure and The City of Gold exprime el tema de la calavera hasta conseguir un clímax que deja sin aliento, y a continuación, con notas que recuerdan a War of the Worlds, deambula a través de tonos de tensión algo oscuros. Otros momentos de transición no especialmente destacables son Secret Doors and Scorpions y Oxley’s Dilemma.

El ataque de las hormigas caníbales se acompaña por el corte Ants!. Su dinamismo, su ritmo demencial y las notas afiladas y agobiantes ofrecen otro de los magníficos temas de acción del maestro, sólo limitado porque las melodías recuerdan a Munich y a la nueva trilogía de Star Wars. La resolución de la aventura llega de la mano de Temple Ruins and The Secret Revealed, un tema de gran fuerza y tensión que prácticamente se enlaza con The Departure, el cual se mantiene en la misma línea y ofrece un clímax apoteósico. El epílogo y los créditos (Finale) como es habitual reúnen varios de los temas principales: el de Marion, el de Indiana, etc.

La conclusión que un servidor saca del álbum es que la edición es mejorable pero contiene una cantidad más que aceptable de la composición, mientras que, como es habitual con John Williams, estamos ante una banda sonora con gran personalidad, muy dinámica y llena de temas espléndidos. Se le puede criticar algo no muy común en él, la reutilización de temas de otras de sus obras, bastante evidentes en algunos casos, pero no es un gran lastre en una partitura muy completa y eficaz.

1. Raiders March – 5:06 2. Call of the Crystal – 3:50
3. The Adventures of Mutt – 3:12
4. Irina’s Theme – 2:26
5. The Snake Pit – 3:15
6. The Spell of the Skull – 4:24
7. The Journey to Akator – 3:08
8. A Whirl Through Academe – 3:34
9. «Return» – 3:12
10. The Jungle Chase – 4:23
11. Orellana’s Cradle – 4:22
12. Grave Robbers – 2:29
13. Hidden Treasure and The City of Gold – 5:14
14. Secret Doors and Scorpions – 2:17
15. Oxley’s Dilemma – 4:46
16. Ants! – 4:14
17. Temple Ruins and The Secret Revealed – 5:51
18. The Departure – 2:27
19. Finale – 9:20
Total: 77:30

El incidente

The Happening, 2008, EE.UU.
Género: Misterio.
Duración: 91 min.
Dirección: M. Night Shyamalan.
Guion: M. Night Shyamalan.
Actores: Mark Wahlberg, Zooey Deschanel, John Leguizamo, Ashlyn Sanchez.
Música: James Newton Howard.

Valoración:
Lo mejor: La música de James Newton Howard.
Lo peor: Es una película vacía, insípida, insustancial.
Mejores momentos: La conversación a través del tubo.

Vaya por delante que soy un gran admirador de Shyamalan (hasta sé escribir bien su apellido de memoria, que ya es decir), al que considero uno de los mejores directores (y escritores, porque se hace sus guiones) de la última década. Salvo La joven del agua, cinta irregular y con algunos problemas (aun así muy entretenida y con buenos momentos), todo lo que ha realizado desde que saltó a la fama con El sexto sentido me parece del mejor cine que se ha visto en los últimos años, aunque haya sido considerablemente incomprendido. Pero El incidente es un bache, y bastante grande.

La historia es muy simple y no está narrada de forma que despierte demasiado interés. Los miedos de la sociedad actual están bien incluidos, pero la trama de ficción fantástica es poco menos que insustancial y a ratos ridícula. No hay sensación de amenaza, no hay tensión realmente palpable en ningún momento, y por el contrario hay varias secuencias bastante discutibles por no aportar nada consistente (la aparición de la anciana es surrealista). Los personajes, uno de los elementos donde Shyamalan obtiene siempre grandes resultados, son anodinos y a ratos insufriblemente tontorrones. No despiertan interés, sus acciones son muy discutibles (qué de tonterías hacen) y los diálogos que salen de sus bocas muchas veces resultan exasperantes (qué cantidad de paridas sobre ciencia sueltan, ¿por qué tanto empeño en dar explicaciones si esto es fantasía?).

Los dos actores principales se muestran bastante limitados: Mark Wahlberg está perdidísimo y Zooey Deschanel, a pesar de sus ojazos, no muestra la más mínima emoción. Y lo que más me ha decepcionado después de la falta de garra de la historia es la dirección. De Shyamalan esperaba virtuosismo y escenificación impecable, pero no ha sido así. Su trabajo es bastante monótono, muy televisivo (el 90% del metraje son primeros planos cerradísimos), y si no fuera por la espléndida música de James Newton Howard, que salva con gran habilidad muchísimas escenas, el resultado habría sido mediocre.

A rasgos generales no puedo considerarla como una mala película, no es más que un entretenimiento muy sencillo y poco impactante. Sin embargo eso no evita que viniendo de quien viene la decepción sea de grandes proporciones. Aprobado raspado, y ya veremos si aguanta un segundo visionado.

Man on the Moon


Man on the Moon , 1999, EE.UU.
Género: Drama, comedia, biografía.
Duración: 115 min.
Dirección: Miloš Forman.
Guion: Scott Alexander, Larry Karaszewski.
Actores: Jim Carrey, Danny DeVito, Paul Giamatti, Courtney Love.
Música: Gavin Friday, Maurice Seezer.

Valoración:
Lo mejor: Es un relato atrevido, original, y lleno de humor.
Lo peor: Altibajos en el ritmo y el interés.
Mejores momentos: Muchos de los números del protagonista. Cuando le dice a sus seres queridos que está enfermo. Su entierro.

* * * * * * * * *

Como he dicho en alguna ocasión, es difícil realizar una biografía de un personaje famoso que equilibre bien la descripción de las partes más importantes o relevantes de su vida y el entretenimiento, y en este aspecto Man on the Moon es una de las obras más logradas que he visto. Sí, tiene algún ligero bajón, pero en general cumple correctamente con su cometido, sobre todo si se tiene en cuenta la dificultad añadida por lo estrafalario e impredecible del personaje de Andy Kauffman.

Como el mismo Kauffman se definía, no era un cómico, sino un actor de variedades. Los números, chistes, monólogos y demás espectáculos de este artista eran originales, irreverentes, atrevidos, acertados en ocasiones y fallidos en otras, comprendidos e incomprendidos por igual. Su personalidad era un misterio, sus propios amigos no sabían qué esperar de él (atención a cuando afirma que tiene cáncer y nadie le cree). La cinta sabe aprovechar ese aspecto y hace gala de un humor muy poco común, basado en la sorpresa y el engaño. Siempre consigue ir un poco más allá, quedarse de nuevo con el espectador cuando parecía que ya había mostrado todas sus bazas. Se puede indicar que tiene un par de tramos donde pierde fuelle (con el tema de la lucha se extiende más de la cuenta), pero en conjunto es muy amena y su visionado deja muy buenas sensaciones.

La vida laboral de Kauffman se resume muy bien (mención especial para la aparición de los actores de la serie Taxi), mientras que en la personal se cuenta lo justo sin incidir innecesariamente en aspectos privados o amarillistas. Se muestran las relaciones con su agente y amigo (un excelente Danny DeVito), con su compañero de fatigas (un siempre excepcional Paul Giamatti) y con su novia y posteriormente esposa (una torpe Courtney Love). Sin embargo, como era prácticamente obligatorio se trata muy bien su etapa final, su enfermedad y su fallecimiento, partes donde nos regalan algunas de las mejores escenas , como el viaje que hace, desesperado por esquivar a la muerte, en busca de un curandero, un magufo que como era obvio le engaña tal y como ha estado haciendo él durante toda su vida con el resto de la gente, o como su entierro, muy bonito y emotivo.

Quizá no sea recordada como una gran biografía porque no es un personaje muy conocido, ni como una gran película porque aunque es divertida no llega a ser deslumbrante, pero es una obra inteligente y original que trata muy bien al personaje representado, quien además está bien interpretado por un actor que sea adecua muy bien a las necesidades: el histriónico Jim Carrey.

Mike Oldfield – The Songs of Distant Earth


Mike Oldfield – The Songs of Distant Earth
Género: Nuevas músicas, electrónica
Año: 1994, WEA
Valoración:

The Songs of Distant Earth es el segundo álbum de la época WEA, nacido un par de años después del exitazo que supuso el Tubular Bells II, esa segunda parte que prometía el inicio de una nueva etapa de prosperidad pero al final se quedó en una pequeña perla antes de la debacle final, antes de un sin fin de discos más o menos aburridos.

Mike Oldfield sorprendió a propios y extraños con una obra arriesgada, muy alejada de lo que estaba realizando hasta ahora. El álbum apenas muestra rasgos de rock y se inclina por completo hacia la electrónica y nuevas músicas, con ambientes tranquilos y melodías por lo general apacibles. Pensado como una especie de banda sonora para la novela Cánticos de la lejana Tierra de Arthur C. Clarke, Oldfield nos introduce en un viaje por los confines del sistema solar a través de sonoridades envolventes, de melodías de guitarra y teclados muy suaves rodeadas de efectos y coros diversos.

Destacan temas como Let There Be Light, con un cántico angelical y un trasfondo bastante sugestivo, Magellan, donde tras un inicio arrollador se inclina hacia pianos y guitarras, Oceania, con bonitas guitarras de sonidos muy originales y característicos, y A New Beginning, el más atípico del álbum, un tema espectacular de coros de rasgos africanos.

Sin embargo Oldfield llega bastante tarde a un género ya muy maduro y lo hace con una composición algo monocromática y no muy inspirada que provoca pocas emociones: se escucha con agrado pero no es lo suficientemente hermoso ni impactante como para ser recordado. Hay muchas obras de calidad notablemente superior en estos estilos de músicas, como la labor de Chris Spheeris, la de Ray Lynch o los discos publicados en el sello Narada (David Arkenstone es el más conocido y vendible). Muchos seguidores de Oldfield tienen este disco en muy alta estima, pero un servidor es incapaz de verle ninguna virtud musical digna de mención. Es entretenido pero bastante insustancial.

1. In the Beginning – 1:24
2. Let There Be Light – 4:57
3. Supernova – 3:24
4. Magellan – 4:40
5. First Landing – 1:16
6. Oceania – 3:19
7. Only Time Will Tell – 4:26
8. Prayer for the Earth – 2:09
9. Lament for Atlantis – 2:43
10. The Chamber – 1:47
11. Hibernaculum – 3:33
12. Tubular World – 3:24
13. The Shining Ones – 2:57
14. Crystal Clear – 5:42
15. The Sunken Forest – 2:37
16. Ascension – 5:49
17. A New Beginning – 1:33
Total: 55:48

En América


In America, 2002, EE.UU., Reino Unido, Irlanda.
Género: Drama.
Duración: 105 min.
Dirección: Jim Sheridan.
Guion: Jim Sheridan, Naomi Sheridan.
Actores: Paddy Considine, Samantha Morton, Djimon Hounsou, Emma Bolger, Sarah Bolger.
Música: Gavin Friday, Maurice Seezer.

Valoración:
Lo mejor: Es una historia muy bonita. El reparto está muy bien, excepto…
Lo peor:Paddy Considine, que está horrible, menudo fallo de casting.

* * * * * * * * *

Jim Sheridan, autor máximo de la película (guion, dirección, producción), mezcla en esta historia elementos de su propia vida (la familia protagonista y la pérdida del hijo menor) con la de otros irlandeses que como él emigraron a EE.UU. en busca de una vida mejor. Sheridan se esforzó mucho en ser fiel a realidad, tanto que incluso contó con la aportación de sus hijas para que con sus recuerdos otorgaran más realismo y profundidad a los personajes. También es destacable el retrato de la metrópolis de Nueva York, descrita como calurosa y desbordante de gente de todo tipo y condición. El autor recalca que no sólo sus congéneres pasan por malos momentos, sino que toda la ciudad es un hervidero caótico de miserias donde los habitantes sobreviven como pueden, ya sea hundiéndose en su miseria o por el contrario sin rendirse en la búsqueda de nuevas oportunidades. Así pues En América puede definirse en cierta manera como un drama histórico, a veces bastante lacrimógeno pero nunca desgarrador, sino esperanzador y emotivo; o en otra palabras, es una película hermosa sobre cómo una familia sale adelante tras una situación económica precaria y algunas dolorosas tragedias.

La cinta brilla en algunos aspectos mientras que los puntos negativos se limitan a uno, eso sí, bastante destacable. Hablo de la interpretación de Paddy Considine, el padre de familia. El casting erró totalmente al seleccionar a alguien con tan poco carisma y con unas dotes tan limitadas. El actor es poco menos que infame e insufrible y en cada plano, en especial cuando el personaje debe expresar emociones extremas (pena, ira, etc.), hace el ridículo de forma increíble. Desentona aún más porque el resto del reparto es muy correcto, empezando por las niñas (Sarah y Emma Bolger), dos jóvenes hermanas muy bien metidas en sus papeles (y aquí el director tuvo mucho que ver, pues rodar con niños es muy difícil), y acabando por la siempre excelente Samantha Morton o el imponente Djimon Hounsou, que sorprende con una interpretación de gran ternura.

Un guion de calidad, una dirección que ofrece buen ritmo, con cada escena bien ubicada (aunque algunas en principio parezcan gratuitas), unas actrices en estado de gracia y numerosas escenas encantadoras hacen de En América una película altamente recomendable.

John Williams – The Last Crusade

John Williams – Indiana Jones and the Last Crusade
Género: Banda sonora original
Año: 1989 (1989, Warner Bros.)
Valoración:

John Williams – Indiana Jones and the Last Crusade (expanded bootleg)
Género: Banda sonora original
Año: 1989 (199?, edición no oficial)
Valoración:

En Indiana Jones y la última cruzada estamos en el mismo caso que en su predecesora: la asombrosa e injusta falta de una edición que contenga la mayor parte posible de la composición. No pido un disco doble, aunque es una banda sonora que lo merece, sino simplemente que me expliquen por qué demonios no llegaron a los setenta y cinco (más bien casi ochenta) minutos que permite un CD y que se avergüencen por no ordenar los cortes como es debido. Estamos ante una obra maestra cercenada (al menos ya no son cuarenta, sino sesenta minutos) y la valoración de álbum debe reflejar, muy a mi pesar, ese aspecto. Y de nuevo se hace imprescindible la recomendación de recurrir a las ediciones no oficiales, de las que hay varias bastante completas (aunque probablemente sólo las encuentren en mp3, con la consecuente enorme pérdida de calidad de sonido). Yo he elegido una y me guío por sus nombres, que son muy representativos, pero en otras ediciones serán algo distintos.

John Williams había llegado muy alto en las dos primeras entregas, pero no me cabe duda de que La última cruzada es una de sus grandes obras maestras, una de sus cinco mejores partituras. La variedad temática es indescriptible, cada momento tiene su propio motivo elaborado con total dedicación y con resultados extraordinarios. Todos, absolutamente todos los temas ofrecen sonoridades de gran personalidad, espectacularidad y belleza, y lo consigue sin venderse a la melodía simplista y facilona y sin sacrificar lo más mínimo la correspondencia con las imágenes. De hecho, esta es una de esas maravillosas ocasiones donde la música y las imágenes al unirse forman una obra de arte de una magia sin igual. Por supuesto huelga decir que la orquesta suena perfecta.

Esta aventura se inicia en la adolescencia de nuestro héroe, en una de sus primeras investigaciones importantes. El motivo empleado ofrece un tono vivaz y alegre que expresa muy bien la juventud, emoción y felicidad casi infantil ante la materialización de los sueños del personaje. Pero esta primera incursión del joven Indy en la verdadera arqueología no se completa hasta que ya es adulto. El viaje tras la cruz de Coronado está ahora lleno de peligros y la música realza ese aspecto en The Circus Train and Stealing the Cross y The Cross of Coronado. Atención a los eficaces instantes de rítmicas percusiones, esas grandiosas marchas de acción heroica que fluyen hacia la fanfarria dedicada a nuestro héroe cuando por fin cumple su objetivo. A continuación breves momentos de transición ofrecen a Indiana Jones pistas sobre el posible paradero del grial (Packet from Dad, Incription on the Rock), dando pie así a la trama central de la película.

En Ransacked House observamos por primera vez, entre tonos de misterio, el tema dedicado a los alemanes, aunque lo hace de forma más sutil y ligera a como aparecerá posteriormente. Es una melodía que incluso escuchada a parte de la cinta transmite un claro tono de maldad. El viaje tras el grial nos lleva a Venecia a través de X Marks the Spot, un tema que también incluye la búsqueda de la tumba. El corte, precioso, aúna la magia y el misterio que ofrecen las aventuras en las que los protagonistas se embarcan. En la línea clásica de esta saga asistimos a continuación a momentos de intriga y casi terror y a la aparición de animales que ponen en apuros a los héroes: Into the Catacombs y Ah, Rats!! El primero ofrece un homenaje al tema del arca, recuperando el tema de la primera película, y el segundo incorpora, entre instantes de intriga, notas más bellas y emotivas dedicadas a la protagonista femenina de esta ocasión, Elsa. Seguidamente deja entrever durante unos segundos el tema del caballero cruzado (aquí dedicado al que está en la tumba, pero será expuesto en toda su plenitud más adelante para el que aparece protegiendo el grial) y en los últimos instantes se decanta por el peligro cuando las catacumbas se incendian.

En la huída de Venecia hallamos un tema (Escape from Venice) que en cierta manera (más por las intenciones que por la música) recuerda al de las cestas (The Basket Game) de En busca del arca perdida, pues la situación en la película es parecida. Además, si aquél fue de lo mejor en aquella espléndida partitura, éste se encuentra en la misma posición en la que aquí analizo. Nos encontramos ante un espléndido corte de acción y humor, inspiradísimo en sus notas y construido con toda la sabiduría del maestro. Muy original y de melodías muy atractivas, su primer tramo es evidentemente humorístico, pero pronto adquiere un matiz de peligro. De entre todos los grandes temas que ha dado la saga siempre ha sido uno de mis favoritos.

Searching for Dr. Jones y Papa Jones retratan la búsqueda del Doctor Jones, el padre de Indiana. Estos proporcionan instantes de transición, el primero de rasgos intrigantes y el segundo de notas emotivas para resaltar el reencuentro familiar. Precioso juego de insinuaciones entremezcladas con temas varios (incluido el de los alemanes) encontramos en Elsa’s Betrayal. Tras unas escenas no muy destacables (Escape in the Truck y The Jones Tied Up) hace acto de presencia el otro gran tema, la otra joya extraordinaria de la partitura: el famoso Scherzo for Motorcycle and Orchestra. La magistral secuencia de acción de la persecución en motos es acompañada por una sonoridades que mezclan diversión, espectacularidad y tenues rasgos marciales. La composición que Williams nos regala es uno de sus temas más recordados, una pieza desbordante de originalidad y carisma, un auténtico prodigio.

El viaje a Berlín (Blasphemy / To Berlin) expone emotivas notas dedicadas a la familia Jones, pero el final se torna más oscuro, pues deben introducirse en la boca del lobo para recuperar el diario con las pistas sobre el grial. La partida de Alemania
encadena excelentes variaciones del motivo de los alemanes: The Berlin Air Terminal, No Ticket, y Flight to Austria. El más destacable es el inmenso No Ticket, de gran carga cómica, que resulta otro de los granes temas de la película e incluso de la saga. Para finalizar estas escenas hallamos un instante más sosegado e incidental: Keeping Up with the Joneses.

El siguiente tramo musical acompaña a los peligros que sortean los protagonistas a través del desierto hasta llegar al cañón de la Media Luna. La aparición de la hermandad que custodia el grial se representa a través de Brother of the Cruciform Sword y Death of the Messenger from God. El ataque a los alemanes se salda con la muerte de este grupo, pero nuestros héroes aprovechan la confusión para atravesar las líneas enemigas y sembrar el caos. Los cortes juegan con el tema de los alemanes, tonos ligeros de acción y algún instante algo trágico. La espléndida pelea contra la bestia de acero, el tanque de los enemigos, se acompaña por uno de esos magníficos temas de acción marca de la casa: Belly of the Steel Beast. Su inicio es marcial y oscuro para recalcar la presencia del peligro, y desde ahí prosigue a través de un sin fin de melodías espectaculares y fanfarrias heroicas, de transiciones constantes que adaptan con maestría la música a las imágenes. La resolución del conflicto deja momentáneamente unas tristes notas, pero cuando descubrimos que Indiana sigue vivo en seguida se da el salto al cañón de la Media Luna (The Canyon of the Crescent Moon), adquiriendo entonces la música un tono de misticismo con tenues rasgos orientales para en los últimos segundos decantarse por el misterio.

En los pasos finales de la aventura el padre de Indiana recibe un disparo para forzar la intervención del intrépido arqueólogo, para que obtenga el grial para los alemanes. Las sonoridades de Papa Jones Shot son de rasgos oscuros y entristecedores: Indiana sufre la pena y debe enfrentarse a las peligrosas trampas que custodian el preciado tesoro. En el proceso de sortearlas (The Peninent Man Will Pass) Williams expone toda la magia y asombro del momento de forma ejemplar. Destaca un instante que me pone los pelos de punta; son sólo unos pocos segundos, pero el maestro construye con esas escasas notas uno de los momentos más gloriosos de su carrera: transcurridos alrededor de un minuto y veinte segundos el tema alcanza un clímax sobrecogedor, indescriptible. Llegamos a la sala del grial y aparece su custodio, el último caballero cruzado: The Keeper of the Grail. La música mantiene los rasgos de misterio, tensión y revelación con predominio de la sección de cuerdas. La elección del cáliz (The Wrong Chalice / Papa Jones is Healed) pasa por momentos de terror cuando Donovan yerra en su decisión, pero se torna alegre y emotivo cuando Indiana acierta y usa sus poderes para sanar a su padre.

En Temple Destroyed / Illumination / End Credits se desarrollan los últimos minutos de la cinta: el caos que rodea a la destrucción del templo, la salvación de nuestros héroes tras aceptar que no deben abrazar la avaricia y soberbia de jugar con algo superior a ellos y la despedida y fanfarria que cierra esta espléndida aventura. Como es habitual, en los títulos de crédito se rememoran los momentos más importantes de la banda sonora, una banda sonora que para un servidor es sin duda una de las diez mejores de la historia de la música de cine. Indispensable a pesar del inconveniente de tener una edición oficial incompleta y la dificultad de hallar versiones más satisfactorias.

 

1989 (1989, Warner Bros.)
1. Indy’s Very First Adventure – 8:11
2. X Marks the Spot – 3:07
3. Scherzo for Motorcycle
and Orchestra – 3:49
4. Ah, Rats!!! – 3:36
5. Escape from Venice – 4:21
6. No Ticket – 2:42
7. The Keeper of the Grail – 3:21
8. Keeping Up with the Joneses – 3:35
9. Brother of the
Cruciform Sword – 1:53
10 Belly of the Steel Beast – 5:26
11. The Canyon of
the Crescent Moon – 4:16
12. The Penitent Man Will Pass – 3:23
13. End Credits (Raiders March) – 10:36
Total: 58:40
1989 (199?, edición no oficial)
1. Indy’s Very First Adventure – 8:13
2. The Circus Train and
Stealing the Cross- 3:35
3. The Cross of Coronado – 2:18
4. Packet from Dad – 0:54
5. Incription on the Rock – 1:04
6. Ransacked House – 2:04
7. X Marks the Spot – 3:12
8. Into the Catacombs – 2:39
9. Ah, Rats!! – 3:41
10. Escape from Venice – 4:24
11. Searching for Dr. Jones – 1:49
12. Papa Jones – 2:09
13. Elsa’s Betrayal – 2:01
14. Escape in the Truck – 0:50
15. The Jones Tied Up – 2:37
16. Scherzo for Motorcycle
and Orchestra – 3:53
17. Blasphemy / To Berlin – 1:08
18. The Berlin Air Terminal – 2:05
19. No Ticket – 2:46
20. Flight to Austria – 1:26
21. Keeping Up with the Joneses – 3:38
22. Brother of the
Cruciform Sword – 1:56
23. Death of the
Messenger from God – 2:23
24. Belly of the Steel Beast – 5:29
25. The Canyon of
the Crescent Moon – 4:17
26. Papa Jones Shot – 2:54
27. The Peninent Man Will Pass – 3:23
28. The Keeper of the Grail – 3:24
29. The Wrong Chalice/
Papa Jones is Healed – 4:27
30. Temple Destroyed /
Illumination / End Credits – 10:37
Total: 1:35:32

Indiana Jones y la última cruzada

Indiana Jones and the Last Crusade, 1989, EE.UU.
Género: Aventura, fantasía.
Duración: 127 min.
Dirección: Steven Spielberg.
Guion: Jeffrey Boam, historia de George Lucas y Menno Meyjes.
Actores: Harrison Ford, Sean Connery, Denholm Elliot, John Rhys-Davies, Alison Doody, Julian Glover, River Phoenix.
Música: John Williams.

Valoración:
Lo mejor: Guion (acción, aventura, humor, personajes…), actores con una química insuperable, una banda sonora gloriosa y una realización espléndida.
Lo peor: Nada.
Mejores momentos: Tantos… La huida de Venecia, la huida del castillo en motos, la lucha contra el tanque, la estancia en el cañón de la Media Luna…
La pregunta: ¿Por qué en El arca perdida no le manteían el acento a Sallah en la versión doblada y ahora sí?
La frase: Debería estar en un museo.

* * * * * * * * *

Probablemente las malas críticas que tuvo El templo maldito le indicaron a Spielberg que quizá sería mejor repetir el esquema argumental de En busca del arca perdida y no volver a caer en los problemas de la anterior. Y funcionó, vaya si funcionó, porque La última cruzada es sin duda la mejor entrega de Indiana Jones. Todo en esta cinta es sobresaliente, brillante. El guion es el más trabajado de todos, y aparte de bordar con creces todos los elementos clásicos de la saga (acción, historia llena de misticismo, lugares exóticos y personajes carismáticos) destaca sobre todo por su equilibrada trama, donde se desglosan muy correctamente las pistas y hallazgos de las indagaciones, así como por su gran sentido del humor, logrado este gracias a unos diálogos que son siempre perfectos. El ritmo es espléndido, sin descanso y sin aglomeraciones. Cada escena está puesta donde mejor funciona, cada diálogo está colocado con precisión exquisita en el instante donde más efectivo resulta.

La realización de Spielberg saca el máximo partido de libreto, ofreciendo una escenificación espectacular y un manejo de cámara como siempre tan profesional como virtuoso. La fotografía, el vestuario, los decorados, las localizaciones y los efectos especiales son de primer nivel, y la banda sonora de John Williams resulta la más completa y fascinante de la tetralogía. Pero quizá lo más remarcable sea la excepcional labor de los actores, todos impresionantes en sus papeles, aunque despunta de manera remarcable la pareja Harrison Ford y Sean Connery. Si los personajes son muy completos y los diálogos sublimes, los intérpretes les dieron vida propia con un resultado inolvidable, obteniendo una de las pajeras que mejor química ha tenido en la historia del cine. Y los secundarios resultan todos muy atractivos: los simpáticos Sallah (John Rhys-Davies) y Marcus (Denholm Elliott), la erótica y misteriosa Elsa (Alison Doody), el incansable villano Walter Donovan (Julian Glover), y los nazis en general.

La película es más en todos los sentidos. Tiene más acción (la escena del tanque quita la respiración), más humor (atención a la aparición de Hitler), más personajes (se amplía muy acertadamente la presencia de Marcus y Sallah) y todas las situaciones son más espectaculares, originales y resultonas. El prólogo nos introduce más a fondo en la personalidad de Indiana, mostrándonos sus inicios en la arqueología. El chico que se encargó del papel (River Phoenix) no podía haberse lanzado mejor a la fama, aunque desgraciadamente las drogas acabaron con él pocos años después. Dicho prólogo es buen ejemplo de las enormes virtudes que posee: es intrigante, atractivo, espectacular… Las escenas sobre el tren denotan gran planificación y una realización de gran calidad a pesar de las aparentes dificultades.

Sin embargo, no es más que la punta de un iceberg maravilloso, pues a partir de ahí se lanza en la búsqueda del grial pasando de escena magistral en escena magistral. Venecia, las catacumbas, la huida en lanchas (atención a la música en esta asombrosa secuencia), el reencuentro entre Indy y su padre, la escapada en sidecar, las persecuciones por el desierto, el clímax final, los competidores ambiciosos (Donovan), los enemigos implacables (nazis), la chica hermosa que esta vez esconde una sorpresa (fantástica la interpretación de Alison Doody, que como las otras féminas de la saga no llegó a hacer nada más digno de mención en su carrera) y por supuesto los misterios que juegan con leyendas pseudo históricas dan forma a una producción mítica, inolvidable y que se puede ver un millar de veces, pues no pierde ni con los años ni con los visionados.

Saga Indiana Jones:
En busca del arca perdida (1981)
Indiana Jones y el templo maldito (1984)
-> Indiana Jones y la última cruzada (1989)
Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal (2008)
Indiana Jones y el dial del destino (2023)